Aletsch Arena esconde uno de los mayores tesoros naturales de Los Alpes, el Gran Glaciar Aletsch. Desde los miradores de Moosfluh, Bettmerhorn and Eggishorn podremos disfrutar de unas panorámicas extraordinarias de este gigante de hielo y nieve que tienen una longitud total de 23 kms desde su origen en la region de Jungfrau (4.000m) hasta Massa Gorge (2.500m).
La estación se divide en tres áreas: Riederalp (1.925m), Bettmeralp (1.950m) y Fiescheralp (2.212m). Con un total de 104 kms de pistas esta estación ofrece una gran variedad de itinerarios para que el esquiador o el snowboarder, sea cual sea su nivel, pueda disfrutar al 100%. Las condiciones de nieve cuando tuvimos la oportunidad de visitarla eran excelentes, pues esta temporada las precipitaciones de nieve han dejado más de 7m de nieve desde que llegó el invierno, un hecho que no se repetía desde el año 1999.
Aletsch Arena acostumbra a estar frecuentada por familias suizas, aunque entre sus visitantes también se encuentran esquiadores o snowboarders venidos desde Alemania o Bélgica. Pero el glaciar no es el único reclamo que atrae y que tanto enamora al público del resort, sino que además, en los días despejados se puede distinguir a lo lejos la pirámide característica del Matterhorn.
Las instalaciones son modernas y muy rápidas, haciendo que durante las subidas no podamos prácticamente relajar las piernas. Y otra cosa más que tanto nos gusta, ¡sin colas!
Sin perder detalle con Skitude
Durante todo el fin de semana nos acompañaron las nubes dejando incluso alguna precipitación en forma de nieve, por lo que pudimos esquiar durante los dos días con unas condiciones de nieve inmejorables. A través de la app Skitude pude registrar todas y cada una de las bajadas realizadas a lo largo del dominio esquiable de Aletsch Arena, pudiendo así seguir acumulando kilómetros y desnivel en mi perfil.
Un entorno sin coches
Para acceder a los 3 núcleos principales de la estación: Riederalp, Bettmeralp y Fiescheralp lo haremos mediante los diferentes telecabinas o teleféricos que salen desde las poblaciones de Mörel, Betten Talstation o Fiesch. Poblaciones a las que se accede fácilmente mediante el ferrocarril que proviene de Brig o Visp.
Esto hace que en ninguno de los 3 puntos clave de la estación exista el humo o ruido tan característico y a la vez molesto de coches o autobuses, convirtiendo el entorno en un sitio perfecto para disfrutar al 100% de la naturaleza, o para poder pasear tranquilamente con los niños.
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